¡Plántate!
¡POR CADA LIBRO, PLANTAMOS UN ÁRBOL!Prólogo de Felix Finkbeiner
He tenido el placer de conocer muy bien a Josep a lo largo de casi diez años trabajando juntos para construir la fundación Plant-for-the-Planet España. Conocí a un hombre que se las arregla para dirigir una de las compañías más importantes del país, DKV Seguros, mientras dedica una enorme cantidad de tiempo a abordar los desafíos sociales y ambientales en España y en todo el mundo.
Al escribir este libro, ha desarrollado un conocimiento y una comprensión inusualmente profundos de algunos de los mayores desafíos de nuestro tiempo. Lo apreciará como un pensador integrado y talentoso, que ve patrones y establece conexiones entre diferentes ámbitos. Especialmente entre el cuidado de la salud y la conservación y restauración ambiental. Ha hecho un trabajo maravilloso en este libro aclarando las conexiones entre la salud humana, la biodiversidad y el cambio climático.
Una de las cosas que tenemos en común es nuestra profunda preocupación compartida por la deforestación global y la profunda convicción de que se puede revertir. Naturalmente, los árboles por sí solos no pueden resolver la crisis climática. Hay que reducir drásticamente las emisiones globales de carbono poniendo fin al uso de combustibles fósiles, reduciendo el consumo de carne y con otras medidas presentadas por Josep en este libro. Debemos reducir las emisiones y restaurar los bosques al mismo tiempo para evitar que la temperatura global supere límites críticos.
Restaurar los ecosistemas del mundo es una tarea enorme y estoy enormemente agradecido a Josep por haber dedicado tanto tiempo y energía a esa misión esencial. ¡Este libro es otra importante contribución a esa misión! Estoy seguro de que como lector apreciará como yo la habilidad del autor para explicar fenómenos complejos de manera concisa.
Historia Plant-for-the-Planet
Movimientos que remueven conciencia Plant for the planet y ¿Por qué empezó?El planeta y ser humano
5 Things To Know From Today’s Ground-Breaking IPCC Climate Report - WEF - 1:24
¿Quién es el responsable del cambio climático? En el informe IPCC está claro…These Tiny Urban Forests Could Be A Secret Weapon Against Climate Change – WEF – 2:03
La propuesta de Miyawaki para crear gran biodiversidad con bosques pequeños en entornos urbanosClimate Spiral - NASA - 1:10
Ver la evolución de la temperatura de la tierra desde 1880 hasta 2021 según la NASAHow to be a good ancestor - TED - 7:03
¿Quién piensa en los que vienen detrás? Dejemos un mundo mejor para ellos…Here are 4 countries that give the natural world the same rights as humans - WEF -1:09
Los animales ya tienen derechos, ¿La naturaleza debe tenerlos también? Hay países que ya los tienen, ¿por qué no el nuestro?Situación de los bosques
Deforestation and forest degration E.V. - 1:45
Las consecuencias de desforestar, una acción que tenemos que revertirLos árboles se comunican por el subsuelo - BBC news - 1:51
Los árboles pueden parecer seres solitarios, pero no lo sonL'Intelligence des Arbres – Júpiter - 3:20
Cómo los árboles se comunican y se cuidan entre ellosPlantar más árboles para sembrar el futuro
Hay que dejarlo claro de nuevo: los árboles por sí solos no van a resolver el enorme problema del calentamiento del planeta. Es más, en los últimos tiempos científicos de la ONU han alertado sobre los efectos colaterales que la plantación masiva inadecuada de árboles puede tener en la biodiversidad. Es responsabilidad de los gobiernos legislar para reducir las emisiones de forma urgente, pero las empresas y la ciudadanía debemos también implicarnos.
En el siglo xxi, un aumento del calentamiento global generará mayores riesgos para la estabilidad y evolución de los ecosistemas terrestres, también los forestales. Si la temperatura aumenta más de 3 °C, el 44 % de los ecosistemas terrestres globales corre el riesgo de pasar de sumideros de carbono a fuentes de carbono. El cambio climático plantea enormes desafíos, también para el sector forestal. Los gestores forestales deberán incorporar el calentamiento global en su planificación y ajustar sus prácticas de gestión a fin de reducir la vulnerabilidad de los bosques y facilitar su adaptación a este fenómeno.
Conocí a Felix Finkbeiner el año 2011 y quedé impactado con su mensaje: «Los adultos no estáis haciendo lo que deberíais, estáis destruyendo el planeta. Los niños debemos actuar ya, si no será demasiado tarde». Desde aquel día en que conocimos a Felix y a su padre Frithjof, juntos, nuestras familias compartimos un mismo proyecto, Plant for the Planet, con un doble objetivo: empoderar a los niños y jóvenes frente al cambio climático y reforestar el planeta.
What if there were 1 trillion more trees? - TED - 5:24
¿Más arboles son nuestra salvación? Quizá no es toda la solución, pero ayudarían sin dudaWhat is the trillion trees movement? And Why does it matter? - WEF -1:39
Movimientos para paliar la deforestación y ayudar a revertir la situación.
Las empresas deben ser parte de la solución.
The World's Second Biggest Rainforest is No Longer Under Threat | Green Solutions - WEF - 1:23
Casos de éxito de crear bosques para combatir el cambio climático, África, un ejemploCosta rica doubled, the size of its reinforest - Uplink WEF - 1:27
Costa rica, utilizando bien un caso de éxito de restablecimiento del ecosistema mediante recaudaciónMarc Benioff, Salesforce & 1t.org Make Tree-Planting Pledge | Global Citizen Live - 0:51
La responsabilidad de las empresas va más allá de los beneficios, Benioff nos lo deja claro, cuida tu planetaLa otra emergencia: la pérdida de biodiversidad
Además de la emergencia climática, estamos viviendo la emergencia de la pérdida de la biodiversidad, que afecta a las otras especies y a nosotros mismos. Los seres humanos también dependemos de ecosistemas sanos. Aunque somos apenas el 0,01 % de la materia viva de la Tierra, ponemos en riesgo a todas las demás. En el año 2020 se registró un hito sin precedentes: los materiales fabricados por los humanos sobrepasaron la biomasa del planeta.
Los ecologistas hablan de la sexta extinción masiva de la historia de la Tierra. Esta reducción de biodiversidad viene originada por la combinación de cambio climático, la contaminación de hábitats, la sobreexplotación de la tierra y del mar y la invasión de algunas especies dañinas en ecosistemas frágiles. La conclusión parece clara: la conservación de buena parte de la biodiversidad de la Tierra depende también de la protección de los bosques. No se trata solo de plantar más, sino de conservar lo que ya tenemos. La pandemia del coronavirus, que ha causado más de 6 millones de muertos en el mundo, debería ser también un aviso muy serio sobre la importancia de conservar los bosques como fronteras de seguridad para la salud humana. Cada vez son más numerosas las pruebas que relacionan el cambio del uso de la tierra, por la tala de masas forestales para su utilización en la agricultura o la ganadería, con la aparición de enfermedades. El 75 % de las nuevas infecciones emergentes de las últimas tres décadas son zoonosis: surgieron en animales y cruzaron las barreras entre especies para infectar a humanos
Al inicio del Holoceno, hace unos 12.000 años, el peso de todos los animales vertebrados se distribuía de este modo: el 99 % eran salvajes y solo el 1 % eran humanos. Ahora el 67 % de vertebrados es ganado, los humanos sumamos el 32 % y apenas nos queda el 1 % de animales salvajes.
4 Parts Of The Planet Where Trees Bring Ecosystems Back To Life - Uplink WEF - 2:31
Los árboles han creado ya un ecosistema de forma natural, en 4 regionesSave Soil: Our Very Body, Sadnhguru - Conscious Planet - Erik Solherm - 8:22
Restaurar nuestro suelo es una urgencia vital, es necesario cambiar nuestras formas de hacerTom Crowther, The global movement to restore nature’s biodiversity - TED - 11:27
Restaurar el ecosistema, ahora es el momentoEight things to know about forests – UNDP – 0:54
Los bosques son espacios de gran biodiversidad y garantizan múltiples beneficios¿Por qué es mejor construir con madera?
Es clave entender que cuando un árbol se corta y su madera es utilizada como elemento constructivo, mueble u otros, el carbono permanece retenido durante la vida útil del producto. Por el contrario, cuando un árbol o la madera se quema, el carbono que había sido almacenado se libera a la atmósfera de manera casi inmediata. Por eso es fundamental retomar el empleo masivo de madera como material principal para la edificación. Los edificios generan un porcentaje importante de las emisiones anuales de CO₂, tanto por su construcción, con materiales que requieren mucha energía (hormigón, acero), como para su acondicionamiento térmico.
El uso de madera permite atajar dos problemas: en la fase de construcción es un reservorio de CO₂ en lugar de un emisor y, por sus propiedades aislantes, la buena construcción de madera ahorra mucha energía a lo largo de la vida útil de los edificios. El ciclo virtuoso es el siguiente: reforestamos masivamente, usamos de manera sostenible la madera producida, edificamos con ella y volvemos a replantar captando CO₂ de nuevo. Es un círculo virtuoso de captación de CO₂ para la construcción y de ahorro energético para toda la vida útil del edificio.
En el siglo XXI el parque edificado del mundo se duplicará antes de 2060. Más edificios y de mayor tamaño darán cobijo a los cerca de 10 000 millones de habitantes que habrá a finales de este siglo. De aquí al año 2060 el efecto del incremento de la población y la creciente urbanización supondrán una ampliación del parque edificado equivalente a construir una ciudad como Nueva York cada mes. Si seguimos construyendo como hasta ahora, estamos perdidos. Hemos de recuperar el uso de la madera. Necesitamos edificios saludables y sostenibles, buenos para la salud de las personas que viven, trabajan y disfrutan en ellos. La bioconstrucción es salud para hoy y para mañana, y la madera es el material que necesitamos para construir nuestro futuro.
Why Finland is Building a Wood City – The B1M - 6:24
Una civilización sostenible no es volver a las cavernas, Finlandia lo demuestraEurope’s tallest tower in Woho, Berlin – WEF - 1:00
La madera no es la limitante, lo son nuestros prejuicios, un rascacielos de maderaConstruir en madera FSC. El material constructivo sostenible del siglo XXI – FSC España - 8:09
Plantar árboles nos permite tener un ecosistema más sostenibleSalud humana, naturaleza y cambio climático
En 2015 la prestigiosa revista médica The Lancet declaraba el cambio climático como «la mayor amenaza global para la salud a la que se enfrenta el mundo en el siglo XXI». Pero también como «la mayor oportunidad para la salud pública». Se identifican extremos de calor cada vez más frecuentes e intensos que dañan la salud y el 72 % de los países vieron un aumento en la exposición humana a los incendios forestales. Está aumentando la idoneidad ambiental para la transmisión de enfermedades como el dengue, la malaria y el cólera, y en 2020 hasta el 19 % de la superficie terrestre mundial se vio afectada por sequías extremas, poniendo a sus poblaciones en peligro de inseguridad alimentaria y de agua. Actualmente ningún país es inmune a los impactos en la salud por el empeoramiento del cambio climático.
Hoy resulta más evidente que nunca reconocer que biodiversidad y salud son aliados. La ciencia se interesa cada vez más por la relación entre bosques y salud, tanto por lo que sucede en el cuerpo y en la mente cuando estamos cerca de espacios naturales, como, al contrario, por lo que sucede cuando apenas estamos en contacto con los árboles. Uno de los elementos más reconocibles de la relación entre los bosques y la salud es el estrés, un mal que aqueja de forma recurrente en la edad adulta a la población de los países industrializados y que todos, y me incluyo, hemos vivido de forma más o menos intensa y prolongada en el tiempo. Diversas revisiones identifican una correlación positiva entre entornos naturales y la salud psicológica: permiten una recuperación más rápida del estrés fisiológico y psicológico y fomentan el estado de ánimo positivo, la vitalidad y el bienestar.
El enfoque «One Health» promovido por la OMS reconoce la conexión entre el bienestar de las personas, la vida salvaje y el medio ambiente. La salud humana, la biodiversidad y el medio ambiente están interconectadas. Cuando hablamos de propuestas en la acción climática hemos de asegurar un enfoque centrado en la salud: el cambio climático no es una cuestión de ecología o activismo, sino de salud pública.
Breathe Life - How air pollution impacts your body - WHO - 1:18
El impacto de no respirar aire puroClimate Change is Affecting Our Health. Is There a Cure? | Jonathan Patz - TED - 19:07
El efecto en nuestra salud debido a las olas de calor, la contaminación, las infecciones y las restricciones alimentarias y del aguaBaños de bosque, ¿Cómo los “baños forestales” pueden reducir el estrés y mejorar la salud? - WEF - 1:17
Respira aire puro, visita y sumérgete en el bosqueAlimentación para nuestra salud y la del planeta
Hipócrates, el padre de la medicina, dijo la famosa frase: «Sea el alimento tu medicina, y la medicina tu alimento». Es bien conocida desde antiguo la importancia de la alimentación para mantenernos saludables. Lo que no sabíamos es la relación entre la alimentación humana y la salud del planeta. Que se acelere la crisis climática con sus efectos negativos o que la podamos evitar depende mucho de qué y cómo comemos los humanos.
Una cuarta parte de los gases con efecto invernadero los origina la producción alimentaria, que ya ocupa la mitad de la superficie habitable de la Tierra. Aunque se consiguiesen hacer desaparecer ya las emisiones de gases de efecto invernadero del sector de la energía, del transporte y de la industria, las emisiones provocadas por el sistema alimentario mundial, por sí solas pueden ser suficientes para que la temperatura del planeta aumente por encima del límite de seguridad de 1,5 °C.
El principal problema está en la deforestación: la apertura de nuevas áreas de cultivo a costa de los bosques provoca la liberación del CO₂ que estaba acumulado en los árboles y el suelo. No solo se trata de plantar nuevos ejemplares, sino primero de proteger los que ya hay y muy especialmente su suelo, que alberga más de la mitad del carbono del bosque.
No somos conscientes del exceso de consumo de carne en nuestra sociedad. En España, en el año 2020, este consumo fue de 56 kilogramos por persona y año, mucho más que la cifra recomendada por la OMS, que es de unos 15-20 kilogramos año como máximo. Una dieta basada en vegetales produce un impacto entre diez y quince veces menor en el cambio climático que la dieta occidental que incluye el consumo de carne, pescado, derivados de la leche y huevos.
Para alimentar a una población mundial de casi 10 000 millones de personas con una dieta saludable a la vez que se atienden los objetivos de reducción de emisiones de gases con efecto invernadero se requiere de una gran transformación que ponga el foco en cambios en la dieta, la reducción del desperdicio alimentario y las mejoras en la producción de alimentos.
This is the world’s best diet, according to health experts - WEF - 1:39
¿Cómo tenemos que comer para asegurar la sostenibilidad del planeta? La mejora dieta…aquí la tienesScientists say plant-based diets are essential to save the planet - WEF - 1:08
La importancia de los que comemos para salvar el planetaGrowing Tomatoes with Nothing but Sunlight and Seawater – Mashable - 1:06
Cultivemos de forma responsable, granjas que funcionan con energía solarIn timor-leste, this Project pays farmers to plant trees – WEF - 2:02
Cultivemos de forma responsable, granjas que funcionan con energía solarDesastres naturales y desplazamientos poblacionales
Por cada grado de temperatura que aumenta como consecuencia de las emisiones de gases de efecto invernadero, la atmósfera absorbe un 7 % más de precipitaciones del suelo y este calentamiento las fuerza a caer más rápido, más concentradas y provocando más catástrofes naturales relacionadas con el agua. Eso explica que, junto a las sequías e incendios, tengamos más huracanes y tifones barriendo las costas y, en invierno, grandes nevadas, así como inundaciones, sobre todo en primavera. Se calcula que en 2050 el número de personas que deberán emigrar por la degradación del suelo y el cambio climático va a ser de entre 50 y 700 millones. Unos 1300 millones de personas están «atrapadas» en tierras agrícolas degradadas.
Los desplazamientos por motivos climáticos son mayoritariamente desplazamientos dentro del propio país. Solo un porcentaje pequeño migra fuera de su país y de este grupo; la mayoría se queda en los países limítrofes. De los 30,7 millones de desplazados internos por causa de desastres relacionados con el clima en 2020, la gran mayoría se debe a situaciones agudas de tormentas, inundaciones e incendios.
Las acciones que se toman en la gestión de migraciones en un contexto de crisis climática nos llevarán a una sociedad muy distinta. ¿Qué harán las naciones ricas cuando les lleguen migrantes masivamente? La crisis climática no solo es una amenaza para el planeta y la salud, también es una amenaza para la paz y una oportunidad para la solidaridad humana. Los migrantes climáticos se están convirtiendo en el rostro humano del ámbito climático.
El cambio climático y los desplazamientos de la población – RTVE – 4:07
¿Huir o morir? Algunos no tienen otra opción… Fernando Valladares nos presenta el temaCambio climático y desplazamiento, los efectos del clima en la movilidad humana - France 24 – 6:11
Éxodos climáticos en diferentes zonas del planeta. La gran muralla verde, un gran proyecto.Me, the man who stopped the dessert - WEF - 12:34
Para los que dicen que somos capaces, sí lo somos de revertir la situación. Sólo se necesita voluntad.THE GREAT GREEN WALL TRAILER 1:53
Uno de los grandes proyectos del mundo: el sueño africano de crear un gran corredor verde atravesando el continente.Disaster losses and statistics – UNDRR – 1:00
Análisis del impacto de los desastres climáticos en la salud y la economíaÁrboles urbanos y calidad de vida
Los árboles en la ciudad aportan sombra, ayudan a reducir la temperatura ambiente y absorben CO₂, capturan contaminantes atmosféricos, reducen el ruido, el consumo energético por climatización y el riesgo de inundaciones. Por si esto no fuera suficiente, exponernos al verde promueve nuestra salud física y psicológica. Estos beneficios son aún más importantes si tenemos en cuenta que más de la mitad de la población mundial vive en entornos urbanos, y que superará el 70 % en 2050.
El uso de madera en la construcción, junto con los árboles y los bosques en la urbanización, van a ser también elementos centrales de las ciudades climáticamente inteligentes y con mayor calidad de vida. Los espacios verdes de las ciudades son menos importantes que los grandes bosques a la hora de mitigar el calentamiento global, pero representan un papel enorme protegiendo comunidades humanas de los peores efectos del cambio climático.
Aunque renaturalizar las ciudades sin la adecuada planificación y la necesaria mirada social tiene un impacto negativo en las clases sociales más desfavorecidas, las cuales no pueden disfrutar de todos los beneficios que se generan, y se quedan atrapadas en lo que los especialistas llaman «la gentrificación verde». Debemos ser más rigurosos en cómo diseñamos los lugares verdes del entorno en el que la mayoría de nosotros pasaremos la mayor parte de nuestras vidas.
Forest for siustanible cities - EFI - 2:50
Poderosa argumentación de la impotencia de tener árboles en las ciudades y usar madera en la construcciónTiny forest - WEF - 9:55
Un buen ejemplo de la creación de un bosque miyawaki en HolandaReforestando Andalucía - Plant for the Planet - 2:42
El proyecto de Plant for the planet para Andalucía (Planta Andalucía) incluye bosques urbanos en granadaGlasgow is planting 10 trees per each resident – WEF - 1:36
Glasgow plantará 18 millones de árbolesEpílogo
A lo largo del libro no he querido exagerar, la realidad es lo bastante clara. Si exageramos podemos inducir a una posición de pasividad al pensar que, a pesar de hacer todo lo posible, tampoco servirá de mucho. Tenemos el conocimiento científico y disponemos del ingenio humano para afrontar esta crisis planetaria sin precedentes. Lo que está en juego es nuestra supervivencia. Por este motivo me gustaría concluir este libro con una llamada a la acción.
Porque la crisis climática plantea una maravillosa oportunidad de trabajar en grupo, de recuperar el sentido del bien común. Son muchas las personas que desde la sociología nos recomiendan no afrontar esta situación solos. Y tienen razón, porque sería una tarea sencillamente imposible. ¿Acaso puedo cambiar algo si solo yo consumo menos carne? ¿Si solo yo reduzco mis viajes en avión? Hablamos de un cambio de cultura planetaria, de cambiar la forma en la que estamos en el mundo. No infravaloremos la capacidad que tenemos si nos movilizamos.
El último eslabón de esta cadena somos tú y yo, todos nosotros como individuos. Me gustaría dejar una pequeña guía de lo que cada uno de nosotros podemos hacer, pasos sencillos que nos animen a ese cambio de cultura necesario para vivir mejor. No nos preocupemos por buscar culpables ni por el ruido de los negacionistas interesados, preocupémonos por el silencio y la inacción de todos los demás, de todos nosotros. El cambio climático empieza por uno mismo. En tanto que ciudadanos, consumidores, organizaciones y empresas, hasta gobiernos, en este epílogo sugiero un listado de acciones para cada nivel. Si de verdad queremos ser individuos y sociedades solidarias, que cuidan su casa común y la salud de todos, hemos de hacer frente al gran reto de la crisis climática con cambios radicales.
Este libro pretende contribuir al cambio necesario para que se cumplan las palabras de sir David Attenborough: «En mi vida he sido testigo de un terrible declive. En la tuya, podrías y deberías presenciar una maravillosa recuperación».